Buenos días.
Sigo en ‘la era sin Internet en casa’ (ahora mismo estoy en la biblioteca), y como se debe a un error de la compañía en cuestión, parece que de nuevo me enfrento a otra semana desconectada. Esto implica que no puedo usar mi ordenador de sobremesa, donde tengo la información necesaria para actualizar como lo hago normalmente, así que pido disculpas si el blog anda un poco desvenzijado estos días.
Como tengo más tiempo para estar con mis papeles y con mis libros (de todo se saca algo bueno), hoy os traigo dos novedades editoriales que os pueden interesar si sois criminólogos.