Buenos días y feliz 2016 🙂
No considero que esta sea la primera entrada oficial del blog en este nuevo año, pero para entenderlo, dejadme explicar porqué.
He tardado en actualizar el blog porque tengo mi página web personal completamente descabalada. A finales de diciembre tuve un problema tonto con la base de datos que se ha ido haciendo más grande según trataba de arreglarlo. ¿El resultado? Pues que ahora mismo no hay forma de acceder a la web, y tardaré un tiempo en volver a ponerlo todo en orden porque voy a aprovechar para actualizarla por completo, que ya tocaba…
En otro orden de cosas, también me gustaría darle un nuevo enfoque al blog, ya que pretendo seguir con ciertas series de publicaciones, pero este año quiero llenarlo de entradas más centradas en especialidades criminológicas.
El primer cambio va a ser respecto al contenido mismo y el enfoque de los artículos, pero por otro lado también me he propuesto publicar menos a menudo pero más extensamente. ¿Eso es bueno? Habrá que esperar y verlo, pero básicamente he tomado esa decisión porque «quien mucho abarca poco aprieta», y dado que ahora mismo dedico el 75% de mis esfuerzos a sacar adelante proyectos y casos de DACRIM junto a mis compañeros de despacho, creo que el blog debe pasar a un segundo plano pero ganar en la utilidad o grado de interés de los artículos.
He pansado en estructurar las entradas en series, como la de Personajes (esa la quiero retomar), y aunque seguiré con artículos motivacionales que puedan servir a otros criminólogos, voy a intentar dar un paso más allá en lo que a divulgación criminológica se refiere 😉
El blog terminó el año con muchas más visitas que en 2014 y parece que la tendencia seguirá al alza en 2016, año en el que celebrará su segundo aniversario. Recientemente revisé casi todas las entradas y creo que poco a poco va tomando forma, así que ya es hora de pasar a lo que yo llamo «palabras mayores».
Entre los propósitos para el blog en este 2016 incluyo los que cito a continuación:
- Mandar más cartas
- Generar más debates
- Encontrar el equilibrio entre la Criminología y la Criminalística
- Exponer más proyectos personales
- Más análisis y menos opinión (bueno, si está fundada en alguna teoría que venga a cuento, vale)
¡Ah, se me ha olvidado lo más importante!
Nos vemos en la próxima entrada, que será oficialmente la primera de 2016 porque es cuando voy a empezar a aplicar el nuevo enfoque del blog.
Un año más, ¡gracias por estar ahí! 🙂